La pasada semana la Universidad Complutense de Madrid acogió con cariño y esplendor la celebración de las Jornadas sobre Mujeres y Videojuegos: la mujer en la industria del videojuego, donde se barajaron a golpe de charla, coloquio y taller temas diversos relativos a la industria del videojuego, como puede fácilmente deducirse por el encabezado, pero otorgando especial protagonismo a la figura de la mujer, ya fuera desde el punto de vista particular de diferentes mujeres profesionales en diversos ámbitos del sector – desde la programación, la investigación o el mundo de la prensa y la comunicación – como de la propia construcción y representación de la mujer como personaje en diferentes producciones videolúdicas. La organización del evento partió de Mar Marcos, Profesora Titular en la Universidad Complutense de Madrid (Facultad CC. de la Información), y Juan Pablo Ordóñez, un auténtico profesional multitarea que lleva más de una década publicando títulos de diversa naturaleza; desde juegos para móviles hasta mundos virtuales, pasando por aplicaciones y juegos educativos de todo tipo, o juegos de corte experimental.
Entre los participantes se encontraron Tatiana Delgado (Rebel Act Studios, Enigma Software Productions, Zinkia o Tequila Works), Eurídice Cabañes (presidenta y miembro fundador de ARSGAMES), María Rubio (Vicepresidenta de ARSGAMES y coordinadora del proyecto Gamestar(t)), Mónica Esteban (fundadora y presidenta de la fundación Juegaterapia), Sonia Herranz (Axel Springer, directora de la revista Playmania), Beatriz Marcano y Esther del Moral (investigadoras en el área de las nuevas tecnologías para el aprendizaje), y una servidora. No obstante, en las susodichas no sólo participaron estupendas señoritas que se dedican, desde diferentes espectros de ocupación/profesión, a esto de los videojuegos, sino también estupendos caballeros como Michael Santorum (Mercury Steam), Raúl Rubio (Tequila Works), o Josué Monchan (guionista en Pendulo Studios).
En cuanto a mi participación en las Jornadas y a pesar de que soy más de palabra escrita que de hablada, más del anonimato de la interweb que de la inmediatez del discurso presencial, intenté esbozar un breve alegato a favor de un modelo de texto crítico abierto y flexible, permeable a la permutabilidad y variedad del panorama actual de los videojuegos, frente a la persistencia del modelo de análisis tradicional, ése que lleva prácticamente una década aplicando el mismo molde sin apenas variantes a la amplísima gama de producciones que a día de hoy abarca el sector de los videojuegos. Además, defendí la subjetividad y el buen ejercicio del criterio que como redactora intento trabajar y como lectora me gusta apreciar.
Como nota negativa y por motivos de agenda, sólo pude presenciar la (genial) charla de Josué Monchan, quien nos amenizó bastante la mañana con datos muy curiosos sobre la construcción del personaje de Liz Allaire (Hollywood Monsters 2) y otras anécdotas relacionadas con Péndulo Studios, y la de Irene Sánchez, que aportó una información muy interesante en tanto que prácticamente desconocida en nuestro país acerca del mundo del gaming profesional, en este caso femenino, con sus equipos, sus competiciones, sus patrocinadores, sus entrenamientos y hasta sus cuartelillos generales que además funcionan como un show en sí mismo al estar bajo retransmisión en línea las 24 horas.
Para los interesados, no perdáis mucho de vista el blog de las Jornadas, pues el contenido íntegro de las mismas fue grabado en vídeo y será subido en breve para todos aquellos que no pudieron asistir.